martes, 26 de noviembre de 2013

Guía de análisis de la información



EL DESAFÍO DE INVESTIGAR EN INTERNET.

Toda investigación documental, debe estar acompañada de un proceso riguroso de selección de fuentes e información. En este proceso, es importante que tengas como aliado al tiempo esto es, que organices tus tareas y actividades para que realices un trabajo de investigación cumpliendo con ciertos requisitos, de modo que esta tarea sea gratificante.
1. TENER CLARO LO QUE QUIERES INVESTIGAR.
·         Es recomendable que antes de darte a la tarea de buscar en Internet, sepas qué es lo que quieres investigar, qué temas te atraen y sobre lo que estás interesado/a a investigar.

·         Puedes apoyarte de algunos criterios para considerar la pertinencia del tema: novedad, necesidad, importancia, pertinencia.[1]
2. PIDE AYUDA.
·         Puedes consultar a tu profesor, en lo que debes centrar tu investigación. Se recomienda que tu tema a investigar sea específico, que exprese la esencia de la investigación para facilitar tu búsqueda.

·         Una vez tengas definido lo que vas a investigar, y desees iniciar tu búsqueda haciendo uso del Internet (me imagino que así será), puedes apoyarte de recursos muy buenos para optimizar tu búsqueda y que el trabajo de investigar te resulte agradable. Búsquedas avanzadas de Google ofrece en el siguiente enlace trucos que pueden ser de mucha utilidad : http://www.google.es/intl/es/insidesearch/tipstricks/all.html

3. CONTRASTA Y SÉ CURIOSO.
¿Dónde más puedes encontrar información?
·         Date una vuelta por la biblioteca y pregunta si existen libros en los que puedas encontrar alguna referencia sobre tu tema.


·         Consulta libros de texto; aunque los hay de distintas ediciones, seguro encontrarás algo que te pueda ayudar para tu investigación; algún dato curioso, un punto de vista diferente, un contraste con lo que ya encontraste.

·         Apóyate de enciclopedias; si no quieres las tradicionales, esas de varios tomos que huelen a viejito, puedes consultarlas en línea (no me refiero específicamente a la Wikipedia), hay muchas otras que te pueden solventar las dudas con respecto a tu búsqueda.

¡TEN CUIDADO! El procedimiento de esta fase de búsqueda es que sepas discriminar la buena y la mala información, que interpretes y contrastes lo que lees, que compares los puntos de vista. Si te dejas llevar por lo minucioso que resulta este proceso, puedes caer en la trampa de llenarte de información que no se ajusta a lo que buscas y que seas parcial a la hora de tomar decisiones.
                                                                                                                  
4. ANOTA.
·         Tomar apuntes es un ejercicio imperdonable cuando lees e investigas. Las anotaciones ayudan a seleccionar información. Elaborar anotaciones propias, extraer conclusiones, construir fichas bibliográficas son un soporte indispensable en este proceso. Si no lo haces, te tocará andar cargando libros enteros o bien imprimir numerosas páginas, en formatos poco prolijos, que contengan parte de la información que buscabas.

·         Llevarle las anotaciones o ideas a tu profesor para una previa revisión le facilitarás el trabajo. Además, recuerda que el proceso de selección de información debe ser un reto para ti, no para tu profesor.

5. VALORA LA INFORMACIÓN.
·         Al seleccionar documentos verifica que la fuente y el autor sean confiables. Existen sitios en Internet que no poseen referencia bibliográfica, eso limita la posibilidad de asegurar que el contenido de tu trabajo sea enriquecedor.

·         Respeta la propiedad intelectual. No olvides la obligación moral de valorar el trabajo que otros ya han hecho.


[1] Bernal, César. Metodología de la investigación. Tercera edición, Editorial Pearson 2010 pp 82, 83.

Advertencia para los que leen

Quien lee vive menos...

  • Menos estresado.
  • Menos aburrido.
  • Menos amragado.
  • Menos engañado.
  • Menos oprimido
  • Menos explotado

jueves, 14 de noviembre de 2013

Muere lentamente (Pablo Neruda)

Muere lentamente quien no viaja,
quien no lee, quien no escucha música,
quien no halla encanto en si mismo.

Muere lentamente quien destruye su amor propio,
quien no se deja ayudar.

Muere lentamente quien se transforma en esclavo del habito, repitiendo todos los días los mismos senderos,
quien no cambia de rutina,
no se arriesga a vestir un nuevo color
o no conversa con desconocidos.

Muere lentamente quien evita una pasión
Y su remolino de emociones,
Aquellas que rescatan el brillo en los ojos
y los corazones decaidos.

Muere lentamente quien no cambia de vida cuando está insatisfecho con su trabajo o su amor,
Quien no arriesga lo seguro por lo incierto
para ir detrás de un sueño,
quien no se permite al menos una vez en la vida huir de los consejos sensatos…
¡Vive hoy! - ¡Haz hoy!
¡Ariesga hoy!
¡No te dejes morir lentamente!
¡No te olvides de ser feliz!

viernes, 8 de noviembre de 2013

LA PROFESIÓN DE ESTUDIANTE



La profesión de estudiante.

Por Serafín, María Teresa. Comprensión lectora. Editorial Santillana. P.36

Dícese que se va al escuela para aprender; ¿pero aprender qué? Algunos responden que historia y matemática, otros, que algún método de estudio que ayude a desarrollar la capacidad propia de aprender; incluso en el mundo del trabajo. De hecho, en la organización actual de la escuela, todos los estudiantes adquieren a menudo nociones relacionadas con diversas materias más que métodos generales de estudio. Cada estudiante se organiza por sí solo creándose hábitos de estudio como autodidacta. Los estudiantes que son buenos en la escuela no necesariamente son los más inteligentes y estudiosos, aunque son a menudo los más eficientes los que han sabido elaborar un buen método de estudio.
            Los buenos estudiantes en la escuela comprenden lo que deben hacer, no pierden el tiempo, logran interactuar con los profesores entendiendo qué es lo que éstos quieren y presentando bien los resultados de su estudio; han conseguido, sobre todo, tener una relación fácil con el estudio y viven bien su vida de estudiantes. En cambio, muchos tienen dificultades y obtienen resultados inferiores a sus esfuerzos, aun teniendo cualidades positivas, porque trabajan de manera desordenada y desperdiciando energías. Estos estudiantes pueden considerarse “diletantes” del estudio que no han logrado adquirir un buen método de trabajo. Veamos cuáles son sus problemas típicos.
            Ante todo, a algunos les cuesta organizar sus actividades cotidianas. A veces pasan horas frente a un libro pero distraídos y desganados. No hacen proyectos que vayan más allá de la jornada y se ven en dificultades ante cualquier tarea o lección que requiera más tiempo (el diagnóstico es: incapacidad para planificar y organizar el tiempo).
            Otros estudiantes leen y releen el mismo párrafo durante horas intentando aprenderlo de memoria sin lograr, sin embargo camprender su significado (el diagnóstico: falta de concentración).
            Otros, mientras preparan una lección o un examen, realizan una primera lectura exploratoria de todos los textos que deben preparar para pasar luego a una segunda y más tarde a una tercera lectura, sin tomar jamás un apunte y sin fijar las ideas, hallándose así frente a graves dificultades de memorización y sintiéndose perdidos en el momento de llegar al trabajo final (el diagnóstico: falta de capacidad para seleccionar la información).
             Algunos asisten a clase diligentemente llenando cuadernos enteros con apuntes, pero no vuelven a mirarlos hasta pocos días antes del examen, dándose cuenta entonces de que los apuntes se han vuelto incomprensibles por la distancia en el tiempo (el diagnóstico: incapacidad para utilizar apuntes propios).
             Otros leen y fichan libro tras libro hasta el día anterior a la lección o al examen, dejando solo la noche anterior a la prueba para llegar al resultado final de su trabajo (el diagnóstico: ignorancia de los tiempos necesarios para memorizar).
              Otros estudian y son capaces de repetir la lección en casa un día antes; pero luego, frente al docente, rinden poco, no saben expresarse bien y nunca responden con precisión a sus preguntas (el diagnóstico: falta de control de las propias emociones).
              Algunos estudiantes se presentan al examen a veces con la actitud de quien deja todo al azar, habiendo preprardo mal muchos temas para la prueba; otros, en cambio, llegan al día del examen y renuncian y vuelven a casa (diagnóstico: falta de equilibrio).
              Por otra parte, hay estudiantes no motivados, ya que algún maestro los ha tildado de "negados" para una meteria en particular, que no se reponen más de este juicio severo, mientras que probablemente solo haría falta un acto de coraje y ponerse a estudiar con convicción (el diagnóstico: falta de confianza en sí mismos).
             Los hay también veleidosos, que un día de proponen: "hoy cambio de vida y me pongo a estudiar en serio"; comienzan a pararse doce horas frente a los libros, dejan de ver luego a los amigos, de salir o ir al gimnasio, para ceder luego, muy pronto, y recomenzar siendo como al principio (el diagnóstico: falta de continuidad).
             Como hemos visto, son muchas las causas de las dificultades, para afrontar el estudio, pero todas pueden resumirse en una categoría más general: falta de método en el estudio. Con frecuencia, los estudiantes que no son "buenos" en la escuela pueden mejorar sensiblemente su rendimiento si comprenden sus propios errores y reorganizan sus actividades de estudio.
            El lector podrá quedar perplejo frente a la distinción entre estudiantes buenos y meos buenos. A menudo se dice que "ser bueno en laescuela no significa tener éxito en la vida"; sin embrago, y con alguna excepción, esta afirmación es flasa. Numerosas investigaciones una fuerte correlación entre el éxito escolar y el éxito en la vida; por otra parte, es fácil para un adulto darse cuenta de ello analizando los logros de los compañeros de escuela. Tener éxito requiere cualidades muy diversas que van desde el espíirtu de iniciativa hasta la tenacidad, de la capacidad de tratar con los demás hasta las dotes más abstactamente especulativas. La escuela es el primer ejemplo de comunidad en la cual cada uno debe encontrar su propio espacio, desarrollando sus mejores cualidades... Lo importante es afrontar con un método mejor de estudio la profesión de estudiante.